Instante Mágico

Hubo un tiempo lineal donde Ella lo ocupaba todo. Desde que Shepo ingresó en ese espacio los planetas cambiaron su centro de giro. Un mágico instante que rotó la tierra porque de esa manera debía ocurrir para que la transformación de las almas que formaban el pequeño universo familiar fuera posible.
La Madre lo fue aún con mayor fuerza, el padre quedó a un costado compartiendo ahora el lugar de supremacía masculina, la niña tenía un rol específico que la ubicaba fuera del contexto. Y aún con la conciencia de una inevitable muerte futura la vida se instaló definitivamente en aquella casa. Una nueva constelación que lo tenía a él como Rey Sol comenzó a movilizarse de manera sensible a su alrededor creándole la falsa certeza de exclusividad afectiva.
Nadie lo notó, con excepción de la tía Vera. Que no dijo nada porque también ella formó parte de aquella transformación.